El empresario tendrá que abonarle 250.000 pesos a la morocha, luego de que lo demandara por despido, acoso laboral y sexual. Aunque todos los caminos conducían al juicio, finalmente las partes llegaron a un acuerdo durante la etapa de conciliación. Poniendo estaba la gansa.
Ricardo Fort debe pagar. El millonario chocolatero indemnizará a su ex empleada Silvina Escudero con dos importantes cuotas, a cambio la bailarina acepta levantar la denuncia de acoso que sufriera cuando formaba parte de la obra Fortuna 1.
Aunque la postura del empresario parecía firme, finalmente aceptó llegar a un acuerdo en la etapa de conciliación que ambas partes enfrentaron en estos días.
Silvina Escudero había iniciado los trámites de una demanda civil y otra penal en las que acusaba de “acoso laboral y sexual” al propio Fort, reclamando 600.000 pesos por todo concepto.
Fort, frente a esta situación, y ante su poca exposición mediática, decidió llegar a un acuerdo junto a su abogado, el doctor César Caroza. De esta forma, Ricardo abonará 235.000 pesos por el contrato completo, el cual se adeudaba, ya que no se hizo efectivo frente al conflicto que se planteó. El empresario también se hará cargo de los 26.000 pesos de costas que corresponden a la abogada patrocinante de la bailarina, la doctora Ana Rossenfeld.
Cabe recordar que la relación entre ambos comenzó durante la participación de Escudero en Bailando por un sueño; allí Fort intentó conquistarla pese a que ella estaba de novia con el actor Matías Alé.
Según el chocolatero, la bailarina lo sedujo e ilusionó en dos oportunidades, lo cual generó que Ricardo se decida a conquistar a Silvina, luego de los diferentes impases que protagonizaba con quien era su novia oficial por aquel entonces, Virginia Gallardo.
“Me siento un tarado, me ilusioné dos veces con esta mujer”, disparó Fort, horas atrás, mientras relataba lo sucedido. “Ella me pidió que la espere, nos besamos en un restaurante, yo estaba enganchado pero después salió con todo esto de Matías”, añadió.
Luego de chocar contra la negativa de la bailarina, el empresario discutió con ella y la despidió, generando la posterior demanda judicial que ahora se frenó ante la mediación positiva de las partes.
“Hubo gritos y reproches”, contaba, en aquel momento, una fuente cercana a Ricardo. “El no quiere verla nunca más”, añadió la misma voz, dando a entender que era muy probable que Silvina abandonara la obra.
La bailarina, por aquellos meses, se encontraba en la puerta del teatro con una inhibición para ingresar y realizar su trabajo para el cual fue contratada.
Fuente : www.diarioshow.com.ar
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