El humor es la receta antiage de la actriz eternamnete sexy.A los 47 años, vive una segunda
juventud. Algunos creen que es por su joven pareja Ashton Kutcher, otros porque se cuida, pero ella dice que la sonrisa es la mejor arma rejuvenecedora.
El físico de Demi Moore vive una segunda juventud. Tiene 47 años y su belleza parece inmarchitable aunque los mejores días de su carrera parezcan ya lejanos. ¿La clave? Algo muy al alcance de la mano: “Reír y sonreír son los mejores antídotos para el envejecimiento”.Así de segura se mostró en Beverly Hills durante el reciente estreno en Estados Unidos de su nueva película, The Joneses.
“No sé si hay un secreto en particular (para mantenerse joven)”, advirtió la actriz, “pero ésas son de las mejores armas que tenemos”. “Yo aún me veo a mí misma como si tuviera 5 años; tal vez por eso tengo una foto mía a esa edad en mi perfil de Twitter”, añadió entre risas.
David Duchovny (de la serie Los Archivos Secretos X), su compañero de reparto en el filme, echó más leña al fuego: “En realidad tiene 63 años”. Moore, candidata dos veces a los Globos de Oro, por Ghost (1990) y If These Walls Could Talk (1996), apareció radiante en un vestido corto que dejaba entrever sus estilizadas piernas, y se deshizo en risas, mohínes y reflexiones con los medios.
“Nunca me he visto a mí misma como una leyenda, no pienso sobre mí de esa manera”, admitió. “Al final sé que en mi carrera habrá habido películas malísimas y otras buenas; sólo espero haber sido fiel a mí misma y dejar un legado auténtico y honesto. Mientras tanto sólo espero devolver parte de lo que he recibido”, añadió.
Todo para vender.
En The Joneses, Moore y Duchovny interpretan a una aparente pareja perfecta, que junto a sus también supuestamente hijos modelos (Amber Heard y Ben Hollingsworth), se muda a una nueva comunidad.
Pero en realidad no se trata de una familia real, sino de empleados de una compañía de mercadotecnia cuyo objetivo es que todos los vecinos deseen hacerse con los bienes y productos de los que hacen gala en su día a día. La propia Moore conocía bien el terreno que pisaba. Recibe constantes ofertas para llevar un determinado modelo, usar un producto en concreto o publicitar algún acto en particular. Y acepta a menudo.
Un buen ejemplo fue su participación en el anuncio de Freixenet, en España, en la Navidad de 2005. “Justo coincidió cuando me casé con Ashton (Kutcher). Ya no me podía retirar y lo hice justo en plena luna de miel”, apuntó la norteamericana, cuya presencia en la gran pantalla ha sido cada vez más escasa en los últimos años.
“Sólo quiero buen material. Que sea interesante. Como The Joneses. Me enganché al guión; me resultó interesante, relevante, entretenido y te invitaba a pensar. También busco rodar con gente con quien la pase bien, porque al final de nuestras vidas sólo recordaremos las experiencias que compartimos con los demás, no el trabajo en sí”, manifestó.
Su próximo proyecto es “LOL”, que empezará a rodar en julio. Se trata de una comedia basada en la película francesa homónima, donde compartirá cartel con Miley Cyrus, quien será su hija en la ficción.
Por último, Moore se mostró feliz por Kathryn Bigelow, primera mujer en obtener el Oscar al mejor director. La actriz se atrevió en 2008 a grabar un corto, Streak, y aunque de momento no pretende volver a probar suerte, espera que el éxito de Bigelow sea contagioso.
“Necesitamos que haya más mujeres dirigiendo. El porcentaje de mujeres en el Sindicato de Directores es muy pequeño, pero creo que el Oscar de Kathryn va a abrir la puerta un poco más y estoy segura de que ella será la primera de muchas”, concluyó.
Fuente : www.popularonline.com.ar
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