jueves, 15 de abril de 2010

Popi cayó en la trampa de Susana y perdió

Susana y Popiloff salieron apenas cuatro meses.

El final del noviazgo de Susana Giménez habría llegado cuando Damián Popiloff cayó en la trampa que le habría preparado la diva de los teléfonos. Por lo menos así lo indican versiones periodísticas que trascendieron ayer y que desmintieron que todo se acabó porque el joven no colmaba las expectativas de la conductora. Las fuentes aseguran que el muchacho habría mordido el anzuelo que le tiró Susana, quien lo pescó “in fraganti” tratando de engañarla.
Según se afirmó ayer en un portal de Internet perteneciente a un matutino: “Susana Giménez decidió terminar la relación luego de enterarse de que el empresario Damián Popiloff, su ‘amigo con derecho a roce’, seguía coqueteando con todas las mujeres que se le acercaran”.
No es una película. Es la realidad, aunque parezca ficción. Por decirlo de alguna manera, la diva no quería seguir Durmiendo con el Enemigo, parafraseando al filme de Julia Roberts. “Para confirmar estos rumores, Susana envió a una conocida suya a un evento en donde se encontraba Popiloff, para medir que tan fiel era. Pero el empresario inmobiliario no pudo resistir y cayó en la trampa de Susana. Popiloff intentó seducir a la enviada de la diva y éste desliz marcó el final de una relación que duro sólo cuatro meses”, detalló el portal.
Tras la operación de la cadera a Susana, en marzo pasado, nunca se la vio al lado de su último amor. En el poco contacto que tuvo la diva con la prensa, no confirmó la separación. Pero es claro que ya es un hecho. Según se comenta en el círculo íntimo de la diva, “a Susana le cuesta estar sola. Siempre necesita un hombre. Pero parte de su madurez es aprender a distinguir un gran amor de una distracción pasajera... y lo está logrando”.
Punto final, de mutuo acuerdo
A juzgar por estas declaraciones, ¿será cierto que de ahora en más la diva se fijará más en hombres de 45 que de treinta y pico? La misma diva, cuando viajó a Punta del Este para terminar su rehabilitación médica, habría tildado este noviazgo: “Fue apenas un amor de verano. Ya es pasado. Es hora de un respiro”.
En el círculo íntimo se sigue comentando que “para Susana, Popiloff nunca fue el proyecto de una pareja definitiva. La prueba está en su viaje a Punta del Este sola. Más que un indicio, es una definición. Cuando cierra la puerta, sólo hay lugar para sus amigas Teté Coustarot y Celia Sofovich. Nadie más atraviesa los muros. La decisión no es nueva, ni la tomó a las apuradas. El adiós fue un acuerdo entre ella y Damián durante una cena en Casa Cruz. Una despedida, un adiós inteligente entre los dos, como dice el famoso tango” (revista Gente).
Más allá de los diversos noviazgos, Susana no puede hallar al hombre de su vida: “Ella no encuentra a alguien que la comprenda y la serene”. Los últimos noviazgos desde Huberto Roviralta, quien tras la separación se llevó consigo casi diez millones de dólares, fueron el de Jorge “Corcho” Rodríguez, que intentó una relación más estable pero murió en el intento y Jorge Rama, quien le resultó un gran dolor de cabeza (sus negocios la involucraron a Susana en Uruguay, país de origen de él). Popiloff fue apenas un amor pasajero. No dejó Susana que esa historia tuviera rumbo. Esta vez, pareciera que la diva cortó por lo sano. Se quedó sola, pero bien acompañada por sus amigas de siempre.



Susana y Popiloff salieron apenas cuatro meses.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Con Popi fué una equivocación. Pensó que, por el parecido, era el hijo de Roviralta,, cuando vió que no lo dejó.
Está buscando al hijo de Huberto, para seducirlo y así recuperar los 10 millones de dólares,