Aun después de muerto, Michael Jackson sigue siendo noticia. Ahora la mayoría de los medios del mundo entero se han conmovido con una primicia sobre el que fuera el rey del pop.
Lo cierto es que según versiones de testigos, el cuerpo del artista que se encuentra en el depósito de cadáveres en Los Angeles está sin su nariz.
“Algo huele a podrido en Dinamarca”, dice el Hamlet de Shakespeare, que ahora cuando está por finalizar la primera década del Siglo XXI podría reescribirse como “Algo huele a podrido en Los Angeles”.
Según informó el diario británico The Mirror, citando a la revista Rolling Stone, la nariz de Michael no estaría en estos momentos junto a los restos del cuerpo del músico y, en su cara, a la altura de las fosas nasales lo que habría es un gran agujero.
Según los testimonios que aportaron los testigos que aseguraron haber visto esta aberración “la prótesis que llevaría normalmente ensamblada en su cara se ha perdido, desprendiendo trozos de cartílago alrededor de la fosa”.
Este hecho macabro pone al descubierto que la manía que tenía Jackson de llevar cubierto su rostro, se debía simplemente a su necesidad de ocultar su falsa nariz y ése era el móvil por el cual Michael se protegía en público con una mascarilla o distintos barbijos.
Uno de los empleados más antiguos del músico, Adrian McManus, que llegó a afirmar en su momento haber sido testigo de los abusos de Jackson a niños, ahora reveló que “para Michael su nariz era un gran problema. Se colocaba tiritas a los lados o alrededor para cubrirla o sujetarla. Realmente era un implante nasal”.
Otras personas relacionadas con el creador de “Bad” fueron más lejos en sus acotaciones y señalaron que “el Rey del Pop en su armario personal disponía de narices postizas y tubos de un adherente que decía que utilizaba”.
Estos mismos testigos aclararon que con todas las operaciones de estéticas a las que se sometió el cantante durante décadas “modificaron drásticamente su rostro y sus dolores eran enormes”, agregando que con la profanación de la nariz de Jackson “sale a la luz la tortura a la que Michael sometió a su cuerpo durante años”.
La Luna no fue para él
También vino a saberse que el fallecido cantante estadounidense vio frustrado su deseo de ser el primer artista del mundo en viajar a la Luna por las acusaciones de abuso de menores que le fueron hechas.
De acuerdo con el dominical inglés News of the World, el músico muerto a los 50 años estaba “obsesionado” con convertirse en la primera estrella del pop mundial en llegar a la Luna y quería poder bailar su famoso paso robótico en el satélite de la Tierra.
Según el semanario británico, citado ayer por la agencia ANSA, Jackson esperaba participar del proyecto lunar, valuado en 1.200 millones de libras esterlinas (unos 1.970 millones de dólares).
Las revelaciones fueron hechas por el parapsicólogo israelí Uri Geller, amigo personal del cantante, quien dio detalles de la vida del Rey del Pop para un documental de la cadena ITV.
Geller sostuvo que Jackson quería que su espíritu viajara al espacio tras su muerte física.
“El quería ser la primera estrella del pop en viajar al espacio. Sabía que no sólo estaría haciendo historia, sino quebrando records. ¿Se imaginan a Michael bailando sus famosos pasos en la Luna?”, destacó Uri, de 62 años.
Fuente : www.popularonline.com.ar
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