Arnaldo André y Florencia Raggi estuvieron entre los invitados al almuerzo de Mirtha Legrand del 15 de este mes (ella iba para promocionar el lanzamiento de la película Cómplices del silencio). Mudos se quedaron cuando Mirtha habló de la desaparición de una sobrina y su marido, durante la dictadura, y contó que había intercedido para que ella fuera liberada, cosa que sucedió. "Nunca más supimos de él", aseguró.
El legislador Raúl Fernández (ex mano derecha de Aníbal Ibarra y, luego, de Jorge Telerman) vio el video del programa y, lejos de acompañar sus dichos con el silencio, decidió hablar porque, como dijo ayer a LA NACION, lo sacó de quicio la liviandad con la que contó los sucesos. "Lo contó como si fuera una historia, triste, pero una anécdota al fin. Que en su momento no haya hablado es algo que no juzgo, pero después de llegada la democracia, después de la Conadep, después de los juicios, no puede quedarse en silencio. Debería haber aportado pruebas a la Justicia", sostiene. Por eso, solicitó que la Legislatura revise la distinción que parece que la señora Legrand nunca retiró.
Mientras algunos legisladores analizan la letra chica del reglamento, Fernández interpreta que es posible retirarle la distinción aplicando el mismo mecanismo que se aplicó para la aprobación. Algunos diputados macristas le habrían expresado su acuerdo al cuestionamiento, aunque, para el momento del voto, todo puede cambiar. Mientras tanto, Mirtha Legrand se llamó al silencio y ayer almorzó con el matrimonio Duhalde.
Fuente : www.lanacion.com.ar
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