“Sandrini se murió entre mis brazos”

El momento emotivo y triste fue el recuerdo de cómo Sandrini llegó al fin de sus días en los brazos de Palito, cuando ambos trabajaban juntos en cine. “El día que falleció me dolió mucho porque él me lo había dicho 20 días antes”, recordó Ortega. “Lo abracé en un momento, le empecé a hacer masajes en la espalda y él me dijo `lo único que le pido a Dios es poder terminar esta película’”, contó Ortega.
“Y llegamos al último día de filmación, hago la toma con él y me faltaban unos planitos con Niní. Estaba allí Leguisamo y le pedí que me contara cómo fue que se quedó con las corbatas de Gardel. El empieza a contarlo y allí Sandrini le dijo a Leguisamo... ‘che negro, hablando de corbata, esta corbata no me pega con el traje’... y ahí, mientras se desanudaba la corbata, se ahogó y se cayó. Ese fue el último día de filmación. Fue un infarto cerebral. No hubo forma de revivirlo, fue imposible”.
“Malvina y sus dos hijas quedaron solas en el momento de la decisión y me llamaron a mí porque el médico dijo que tenía que haber un hombre. Y murió, no hubo nada que hacer. Veo poco reconocimiento a esa gente que fue tan grande. En México todo el tiempo se hacen homenajes, se les pone nombres de grandes persona a las plazas y los edificios. Acá no se habla más, te morís y se terminó”, finalizó Ortega.
“Yo sí lo pienso, yo todos los meses hago una biografía con quien me parece que lo merece”, dijo Susana.

Fuente : www.popularonline.com.ar